Por El Topo de Miami Miércoles, 30 de Mayo de 2012
A principios de junio de 2012 se
desarrollará la Sesión General de la Conferencia Anual de la OIT en
Ginebra, y con fecha 31 de mayo (mañana) se realizará un supuesto
evento de solidaridad con la llamada Coalición Sindical, en las que
las agrupaciones anticubanas radicadas en Miami “Comité Pro
Sindicalismo Libre” y “Grupo Internacional para la Responsabilidad
Social Corporativa en Cuba”, pretenden boicotear a la delegación cubana
que participará en ese evento.
Según los organizadores, se
pretende montar una campaña mediática contra nuestra nación denunciando
supuestas violaciones y arbitrariedades en contra de los derechos
laborales y sindicales de la masa trabajadora cubana.
Un
correo electrónico circulado entre varios de estos mercenarios internos
da fe de las orientaciones emitidas desde el exterior y su
participación en esta nueva maniobra anticubana.

Esta acción responde al interés de desacreditar nuestro sistema
político y social, de trasladar una imagen interna de caos, violación,
represión, etc., donde juega un papel preponderante la mafia anticubana
de Miami.
En este sentido, se destaca el cubano
emigrado Joel Brito Delgado, quien durante los años en que residió en
la isla ocupó cargos de dirección de departamento en la CTC nacional de
Cuba. Desertó en 1997 en Bolivia, trasladándose posteriormente a Miami
donde reside actualmente.

A su llegada, comienza a vincularse con
directivos de la agrupación contrarrevolucionaria “Federación Sindical
en Exilio Gas y Agua” (FESPEGA), ascendiendo en su nomenclatura
estructural, ocupando el cargo de asesor económico y laboral. En su
trayectoria mercenaria se vinculó con directivos de la FNCA y con
congresistas cubanos americanos con tendencia reaccionaria, estuvo
relacionado con la organización de planes de sabotaje a la
termoeléctrica de “Tallapiedra”, en La Habana.
Actualmente
cuenta con su propio proyecto sindical denominado “Grupo por la
Responsabilidad Social Corporativa”, dirigido a asesorar y financiar a
engendros contrarrevolucionarios en nuestro país como es la “Coalición
Sindical Independiente de Cuba” (CSIC) que agrupa a tres grupúsculos
internos fantasmas que no cuentan con representación, ni membrecía real
en el país, dedicándose fundamentalmente a denunciar y trasmitir al
exterior supuestas violaciones de los derechos sindicales y laborales de
la masa trabajadora cubana por parte de las autoridades cubanas, pero a
cambio reciben de forma mensual más de 3 000 dólares, teléfonos
celulares, cámaras fotográficas y de videos, laptos y memorias flash que
son pagadas por el contribuyente norteamericano a través de los 20
millones que el gobierno de ese país destina para lograr un cambio de
sistema político en la isla.
Entre los principales privilegiados
de estos financiamientos se encuentran los mercenarios María Elena Mir
Marrero, Maybel Padilla Pérez e Iván Hernández Carrillo, este último
excarcelado el pasado año como parte de la mediación entre la Iglesia,
el Estado cubano y el anterior gobierno español, encabezado por José
Luis Zapatero. Cuenta con el apoyo incondicional de diplomáticos de la
SINA, Reino Unido de Inglaterra, República Checa, Reino de Suecia y
Países Bajos.
Este nuevo complot evidencia una vez más el
interés de las organizaciones anticubanas de Miami financiadas por el
gobierno de ese país en tratar de manchar la imagen de la Revolución
cubana y sus organizaciones sociales y sindicales que si responden al
interés de la clase trabajadora cubana desde el triunfo revolucionario
en el año 1959.
Fotocopia de la invitación que se está circulando para la provocación en Ginebra
Firmado:
El Topo de Miami.
Fuente El Blog de Yohandry