Buscar en este blog

Mostrando entradas con la etiqueta espías. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta espías. Mostrar todas las entradas

Gloria La Riva confronta a BIll Richardson en el caso de los Cinco Cubanos

domingo, 20 de octubre de 2013


Gloria La Riva confronta a BIll Richardson en el caso de los Cinco Cubanos 
Durante un discurso en el Club Commonwealth de San Francisco, el 18 de octubre, 2013, Bill Richardson fue confrontado por Gloria La Riva, coordinadora del Comité Nacional para la Libertad de los Cinco, exigiendo la libertad para los Cinco. Cerca del fin de su presentación de una hora en la sala llena de personas, y el programa emitido por radio, se puede ver la intervención de La Riva en el video arriba.

ANTECEDENTES: El 24 de febrero de 1996, el grupo terrorista Hermanos al Rescate (HAR) invadió el espacio aéreo cubano con tres avionetas, después de haber invadido el territorio cubano varias veces en los meses previos, a pesar de múltiples advertencias por el gobierno cubano. El 24 de feb., la fuerza aérea cubana derribó dos de los avionetas invasoras. Cuatro pilotos de HAR murieron. 

Tres años después, Gerardo Hernández de los Cinco Cubanos, quien tuvo nada que ver con el derribo, fue encausado con el falso cargo por el gobierno EEUU -- durante la administración de Clinton -- de "conspiración para cometer asesinato" relacionado al derribo de HAR. Cuba insiste en que actuó para protejer a su pueblo y al territorio. Un jurado de Miami, bajo la atmósfera inflamatoria anti-Cuba de esa ciudad, condenó a Gerardo Hernández y al resto de los Cinco de todos los cargos. Como resultado, Gerardo está sirviendo una injusta sentencia en la prisión federal de Victorville.

La Administración Clinton fue cómplice de los vuelos provocativos de Hermanos al Rescate.
 
Dos veces antes del derribo de 1996, Bill Richardson se reunió con el presidente cubano, Fidel Castro, y le aseguró que el presidente Bill Clinton prometió que prohibiría que los aviones de Hermanos al Rescate volaran el 24 de febrero de 1996. Lea las reflexiones de las reuniones con Richardson de Fidel Castro  y el detalle adicional en el The New Yorker, el artículo (sólo en inglés) de enero 1998. 

Pero Clinton no detuvo los vuelos ilegales. En cambio, su inacción hizo posible que el terrorista José Basulto pudiera instigar una provocación peligrosa y deliberada de los aviones de Hermanos al Rescate. Y fue la administración Clinton que aprobó el procesamiento contra Gerardo Hernández y todos los Cinco.

Ahora, en su nuevo libro, "Cómo persuadir a un tiburón," Richardson culpa a los antiterroristas cubanos, los Cinco Cubanos que estaban en Miami para proteger a sus compatriotas de Cuba. Richardson, de una manera deshonesta y oportunista, le culpa a Gerardo Hernández.

Un extracto del libro de Richardson, dice: "Los Cinco Cubanos, claramente son espías que habían hecho mucho daño -- el líder de ellos, Gerardo Hernández, también proporcionó información a La Habana que llevó a la caída de dos aviones civiles en el Estrecho de la Florida en 1996".

Contra esta mentira flagrante, Gloria La Riva, del Comité Nacional, y Richard Becker, de la Coalición ANSWER, decidieron desafiar la falsificación de Richardson.

Gerardo Hernández se encuentra en una prisión federal con una doble cadena perpetua, y su único "delito", junto con sus cuatro hermanos, es haber protegido a la gente de los ataques terroristas apoyados por los EE.UU. que se originan en Miami. Él ha sufrido 15 años de prisión cruel y vengativa, por la falta del gobierno de EE.UU. y sus agentes, Clinton, Richardson y otros, de actuar con decisión contra los ataques terroristas contra Cuba. Hasta que la lucha sea capaz de liberar a Gerardo, enfrentará cadena perpetua sin libertad condicional. Los demás miembros de los Cinco también se enfrentan a muchos años de prisión EE.UU.

Ayúdenos a exponer el delito de privación de libertad de los Cinco Cubanos. Conozca más sobre la persecución de Gerardo y todos los Cinco por los Estados Unidos; ¡Es importante fortalecer esta lucha con los hechos y ayudar a organizar eventos más amplios para arrojar luz sobre la causa de los Cinco y conseguir apoyo para su libertad!

Lea aquí Declaración jurada de la inocencia de Gerardo Hernández, para sus apelaciones (traducida al español)
Lea el memorando del fiscal Garbus para Hernández acerca de los periodistas pagados por Estados Unidos (traducida al español)  
 
Comité Nacional para la Libertad de los Cinco Cubanos 
 
Tel: 415-821-6545

La detención de los Cinco patriotas fue una conspiración entre el FBI y la mafia de Miami

sábado, 7 de septiembre de 2013
Por Lázaro Barredo Medina*

 
Cada día aparecen mayores evidencias de que lo que aconteció aquel sábado 12 de septiembre de 1998 en Miami obedeció más a la conspiración de oficiales del Buró Federal de Investigaciones (FBI) con la mafia terrorista anticubana, que a la protección de la seguridad nacional de los Estados Unidos.

 En el 2001, cuando abordamos en la Mesa Redonda el proceso judicial contra los Cinco, me llamó la atención una serie de acontecimientos que ocurrieron en torno a la detención en aquellos meses finales de 1998 y publiqué este artículo en el semanario Trabajadores.

 La prensa de Miami reconoció el lunes siguiente a la detención, día 14 de septiembre de 1998, que muchos expertos no se explicaban por qué el FBI había arrestado ese fin de semana a las personas que monitoreaban a grupos contrarrevolucionarios porque era precisamente el FBI uno de los beneficiarios de la información que estas personas recolectaban sobre acciones violentas de estos grupos.

 Un comentario publicado el día 15 de septiembre de 1998 por el Miami Herald planteaba que desde hacía tiempo el FBI tenía conocimiento de la actuación de estas personas dentro de los grupos de Miami, y añadía: "El lunes (14 de septiembre), muchos en La Pequeña Habana conjeturaban que la redada era la forma que tenía Washington de equilibrar la balanza de la justicia contra los siete cubanos exiliados que el mes pasado fueron acusados de tratar de asesinar a Fidel Castro" (se trataba de los detenidos a bordo del yate La Esperanza con la tenencia de fusiles de alto calibre que iban hacia Isla Margarita, en Venezuela, donde se celebraría la Cumbre Iberoamericana).

 Días después, en conferencia de prensa, Héctor Pesquera, recién nombrado jefe del FBI en Miami, reconocía que la detención de los luchadores antiterroristas había generado contradicciones con algunos directivos del órgano de contraespionaje en Washington que no apoyaban esa acción, y agregó que este caso "nunca habría llegado a las cortes" si él no hubiera instado directamente a Louis Freeh, entonces director de ese órgano.

 Evidentemente, algo anormal estaba ocurriendo...

 OFICIALES DEL FBI CÓMPLICES DEL TERRORISMO DE LOS CUBANO-AMERICANOS

 La ola de atentados a hoteles cubanos en 1997 y las posteriores declaraciones del connotado asesino Luis Posada Carriles al The New York Times, pusieron en entredicho a los órganos de la Inteligencia y Contrainteligencia norteamericanos.

 "A mí no me molesta ni la CIA ni el FBI", expresó Posada al Times.

 El diario recordó que hay documentos revelados en Washington por los archivos de Seguridad Nacional que apoyan la insinuación de Posada de que el FBI y la CIA tenían conocimiento detallado de sus operaciones contra la Revolución cubana desde principios de los años 60.

 El Times también reveló por esos días el testimonio del empresario Antonio Jorge Álvarez (Tony), residente en Carolina del Sur, quien dirigía la empresa WRB Enterprises en Guatemala y tuvo en ese país contactos con Posada Carriles y otros terroristas de origen cubano. Con riesgo para su vida, este empresario suministró información al FBI en 1997 sobre los preparativos de atentados contra el Presidente de Cuba durante la Cumbre Iberoamericana en Isla Margarita, Venezuela, y sobre la campaña de bombas que se gestaba contra hoteles en la Isla, pero el FBI demostró poco interés en la denuncia.

 Igualmente, en otra vendetta que olía a chantaje financiero, Posada Carriles reveló que la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA) financió durante años actos de violencia en Cuba.

 Días antes de la mencionada Cumbre, la guardia costera de Estados Unidos detuvo en Puerto Rico una embarcación con cuatro hombres, y encontraron dos fusiles especiales Barret calibre 50 con mira telescópica, mientras el jefe del grupo, el cubano-americano Ángel Alfonso Alemán, aseguró a los oficiales del guardacostas, como si fuera una credencial de impunidad, que tenían la misión de matar a Fidel Castro en Isla Margarita.
 El Jefe del FBI en Puerto Rico en ese momento era este Héctor Pesquera, quien seis meses después de esta detención fue nombrado para dirigir la Oficina en Miami.

 Pesquera ya había trabajado en el FBI a principios de los 80 en Tampa y era jefe de la Oficina en Puerto Rico desde 1995, donde ganó renombre con la detención de patriotas independentistas boricuas.

 Las investigaciones posteriores confirmaron que la embarcación detenida en Puerto Rico era propiedad de José A. Llama, directivo de la FNCA, y que uno de los fusiles calibre 50 pertenecía a José Francisco "Pepe" Hernández, presidente de la FNCA, a quien Pesquera ni siquiera citó para interrogatorio, tras encuentros con los enviados de Miami y de intercambiar opiniones con el abogado defensor de estos terroristas, un pariente cercano suyo, Ricardo Pesquera.

 Estos hechos armaron en 1998 gran revuelo en Estados Unidos. En Miami, la prensa reconoció que las "autoridades se muestran suaves frente a actos anticastristas".

 "En medio de informes de que líderes del exilio cubano financiaron atentados dinamiteros en La Habana, fiscales, conspiradores y policías estuvieron de acuerdo en que las conspiraciones anticastristas en el sur de la Florida no solo son comunes, sino casi toleradas", escribió Juan A. Tamayo, un columnista del Miami Herald.

 En ese artículo de Tamayo, publicado el 23 de julio de 1998, se decía: "Durante años la política tácita de las agencias policíacas ha sido espiar a los militantes anticastristas y romper sus conspiraciones antes que enjuiciarlos, dijeron varios actuales y exfiscales de la región.

 "Desde hace mucho tiempo existe la política de recopilar informes de inteligencia y desmovilizar a esa gente, interrumpir, en lugar de arrestar", declaró un importante exfiscal federal.

 "La policía y los agentes del FBI siempre nos vigilaban, pero básicamente nos dejaban tranquilos", afirmó César Roig, un exmiembro de la organización terrorista Comandos L.

 Una de las cosas más interesantes de este artículo, publicado dos meses antes de la detención de los patriotas cubanos, son las declaraciones de Kendall Coffey sobre la marcada parcialidad para celebrar un juicio "anticastrista" en esa ciudad. Coffey había sido Fiscal Federal en Miami y luego sería uno de los abogados de los secuestradores del niño cubano Elián González.

 Reconoce Coffey en ese artículo: "A través de los años hemos actuado en cierto número de casos pero es muy difícil obtener un jurado en esta parte de la Florida que halle culpables a personas que son presentadas como combatientes por la libertad".

 El propio nombramiento de Héctor Pesquera tiene visos de obedecer a influencias de la mafia y la extrema derecha norteamericana. En cuanto llegó a Miami sostuvo reuniones con dirigentes contrarrevolucionarios y reafirmó compromisos con ellos.

 En declaraciones publicadas el 29 de julio de 1998 enfatizó que "a pesar del torrente de informes sobre ataques terroristas de exiliados anticastristas, no planeo aumentar la prioridad de investigación para tales acciones".

 A buen entendedor, pocas palabras...

A LA MAFIA LE URGÍA UN PRETEXTO

 La mafia terrorista de Miami en 1998 estaba en medio de una crisis. La muerte de Jorge Mas Canosa acrecentó las pugnas internas y esa crisis se acentuó con los hechos de Puerto Rico, que involucraron directamente a la FNCA y con otra investigación pública sobre un alijo de armas y explosivos almacenados en una embarcación anclada en el río de Miami y perteneciente a grupos terroristas cubanos (operativo que el FBI realizó gracias a la información suministrada por los patriotas cubanos).

 De igual modo, a pesar del descomunal reforzamiento de la guerra de agresión contra Cuba que se desató a partir de la provocación del 24 de febrero de 1996 y del establecimiento de la Ley Helms-Burton, la política norteamericana comenzó a agrietarse ante la realidad cubana.

 Preocupados con la posibilidad de cambios hacia la Isla, el entonces senador Bob Graham, de la Florida, a instancias de los grupos anticubanos más recalcitrantes, pidió al Pentágono un reporte especial sobre Cuba, en espera de nuevas justificaciones para reforzar la agresión y el "tiro le salió por la culata", porque la conclusión del estudio, en el cual participaron varias instituciones y personalidades políticas y militares norteamericanas, fue que la Isla no constituye una amenaza para la Seguridad Nacional de los Estados Unidos.

 También la mafia sufrió otra derrota estratégica cuando en aquel tiempo el llamado "Zar de las Drogas" en el gobierno norteamericano, el general Barry McCaffey, declaró que Cuba no tiene vínculos con el narcotráfico. Sintieron tanta molestia ante esas declaraciones, que el congresista Lincoln Díaz-Balart llegó hasta a tildar ante la prensa de "comunista" a este general de cuatro estrellas, condecorado con los máximos honores y distinciones por acciones combativas.

 A mediados de ese año se profundizó la cooperación entre el FBI y las autoridades cubanas, cuando oficiales de ese órgano viajaron a La Habana tras el envío de una carta del Comandante en Jefe Fidel Castro al Presidente norteamericano William Clinton mediante el escritor colombiano y Premio Nobel Gabriel García Márquez, donde el líder cubano alertaba sobre los peligros de la violencia terrorista desde territorio norteamericano y, sobre todo, la amenaza de comenzar a atentar contra aviones civiles en pleno vuelo, que trasladaban turistas a Cuba.

 Los oficiales del FBI recibieron en La Habana un paquete importante de información con fotos, documentos y cintas de video de al menos 48 terroristas radicados en Miami, material suministrado a las autoridades cubanas precisamente por esos patriotas que monitoreaban a las organizaciones terroristas en La Florida; quienes después serían detenidos y cuyas pruebas serían desestimadas en el juicio al ser clasificadas como "secretas" por el gobierno norteamericano.

 La más connotada derrota la sufrió la extrema derecha cuando, por 72 votos a favor y 24 en contra, el Senado se opuso a Jesse Helms y aprobó una enmienda que facilitaba la venta de alimentos y medicinas a Cuba bajo determinadas prerrogativas. Igualmente, en el Capitolio progresaba la oposición a la inconstitucional medida que prohíbe y penaliza los viajes de los norteamericanos a Cuba.

 Es en este contexto que la mafia terrorista necesitaba urgentemente de un pretexto que paralizara ese movimiento a favor de una mejor relación hacia Cuba, y para ello encontraron un sostén en el Jefe del FBI en Miami y de los personeros de la Fiscalía; mientras en Washington los "padrinos" de la extrema derecha establecían contacto con el máximo nivel para apoyar la detención de los patriotas cubanos al amanecer del sábado 12 de septiembre de 1998.

 Lo insólito es que mientras el Jefe del FBI en Miami empleaba sus recursos para detener y armar un expediente contra cinco personas que trataban de evitar actos de terrorismo que dañaban tanto a su pueblo como a ciudadanos norteamericanos, en esos mismos instantes andaban libres, sostenían sus contactos y se entrenaban en el sur de la Florida, 12 de las 19 personas que tres años después se presume llevaron a cabo los actos terroristas contra las Torres Gemelas en Nueva York y el Pentágono en Washington.

 El FBI en Miami jamás obtuvo una sola pista sobre estos terroristas... Estaban demasiado ocupados en el tema cubano.

Fuente Periódico Granma


* Periodista cubano. Director del diario Granma y coautor del libro “El Camaján”

Lee Cindy Sheehan carta dirigida a Obama en Estocolmo (+ Video)

viernes, 16 de marzo de 2012
 
La activista norteamericana por la paz Cindy Sheehan, dio lectura a una carta al Presidente Obama enfrente de la embajada de EE.UU. en Estocolmo, para pedirle que ejercite sus poderes ejecutivos para liberar a Los Cinco Antiterroristas Cubanos, combatientes encarcelados en las prisiones de ese país desde 1998. Cindy intentó entregar la carta en la Embajada, acto que fue impedido por la policía sueca (el diálogo entre Cindy y el policía a cargo está subtitulado al español). El video en YouTube muestra la manifestación, realizada el miércoles 14 de marzo frente a la Embajada de los EE.UU. en Estocolmo.

Además, en dicho acto, la activista solicitó el permiso de Obama para que René González -liberado en octubre pasado, pero que debe sufrir tres años de libertad condicional supervisada en Miami- regrese a su país por lo menos dos semanas, para ver a su hermano moribundo, Roberto.

Miembros de la Campaña por la Libertad para los Cinco Cubanos acompañaron a Sheehan a la embajada.

Vea video en http://www.youtube.com/watch?v=ioRjuSGxar8&feature=youtu.be
Con la tecnología de Blogger.
 

Buscar en:

Entradas populares