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No es más que un hasta luego

domingo, 15 de marzo de 2015
 

Espero estar pronto de regreso para continuar en mi puesto de combate en esta batalla de ideas, saludos cordiales

Rosa

Procedente de Cuba Presidente Hugo Chávez arribó a Venezuela

domingo, 24 de julio de 2011

El Mandatario fue recibido con los honores correspondientes en la Rampa 4 del Aueropuerto de Maiquetía, en el estado Vargas, donde también se dieron cita algunos ministros de su Gabinete.

El presidente de la República, Hugo Chávez, llegó este sábado aproximadamente a las 09:45 de la noche a Venezuela, procedente de Cuba, donde por una semana cumplió con la primera fase de la quimioterapia indicada como parte del tratamiento médico que recibe, luego de haber sido operado de un tumor abscesado con células cancerígenas.

El Mandatario arribó al país a través de la Rampa 4 del Aeropuerto de Maiquetía, en el estado Vargas.  Le acompañaron el vicepresidente Elías Jaua, junto a los ministros de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez y de Comunicación e Información, Andrés Izarra, además del canciller Nicolás Maduro, entre otros integrantes de su Gabinete.
Al dirigirse a los cadetes y guardias de marina que lo recibieron con los honores correspondientes, Chávez expresó: “Ustedes han retomado las sendas de Bolìvar, de Miranda (…) Ese es el rumbo, no lo perdamos más nunca (…) Esta Patria, así como ustedes, nacieron para ser libres, libres para siempre”.

Refiriéndose a la evolución de su estado de salud, agregó: “Estamos enfrentando esta emboscada de la vida que estamos venciendo y que vamos a vencer”.
Antes de partir a Cuba, el pasado 16 de julio, Chávez agradeció al pueblo venezolano por  los deseos de pronta recuperación, y sostuvo que todas esas manifestaciones de amor lo comprometen a seguir batallando y a seguir viviendo.

“Todo ese amor, todo ese desvelo de ustedes, todo ese esfuerzo por el sacrificio a la Patria me obliga a no quedarles mal. Esto significa no sólo seguir batallando, no sólo luchar, sino que estoy obligado a vivir y viviré”, precisó.

Texto/Héctor Escalante
Foto/Cortesía VTV

http://www.correodelorinoco.gob.ve/inicio/presidente-chavez-arriba-a-venezuela/

Llegada del Presidente Hugo Chávez
Aeropuerto de Maiquetía, estado Vargas
Sábado, 23 de julio de 2011

Presidente Chávez
Les agradezco mucho mi teniente, mi guardia marina, mis cadetes que hayan venido rápidamente a este encuentro. Voy a saludarlos porque uno se siente cadete todavía, a pesar de los 40 años que han transcurrido desde el día aquel por cosas de la vida y de la voluntad que ya se movía en uno entré a la academia militar, el mismo año que el almirante Maniglia entró, ese es mi compañero de promoción ¿conocieron a Maniglia? Comandó la armada bueno los más antiguos lo conocen, ustedes lo conocen, lo que pasa es que ustedes son un poco nuevo bueno tu no eres tan nuevo.
El almirante Orlando Maniglia fue comandante de la armada hasta hace dos años ¿no fue? Entramos juntos, él a la Escuela Naval y bueno muchos otros compañeros, lo recuerdo en este momento a él que llegó al grado de almirante, éramos los muchachos de los 60 y entrábamos llenos de ilusiones y de sueños a las escuelas militares el año 71, por estos días de julio, en agosto entramos, el 8 de agosto, así que quería saludarlo, porque además ahora en esta nueva etapa de mi vida enfrentando vamos a decir como una emboscada de la vida ¿verdad? una enfermedad difícil pero que la estamos venciendo y la vamos a vencer, con el favor de Dios y la Virgen, de la ciencia médica y la voluntad que tenemos ¿verdad? para seguir el camino, abriendo los caminos de la Patria nueva, cumpliendo la responsabilidad que la historia nuestra nos ha asignado a cada uno.

Ustedes también comiencen a cumplir el papel de ustedes, yo comencé hace 40 años y aquí voy, aquí vamos, ustedes están comenzando miren pa’lante 40 años más, 50 años más, imagínense cómo será esta Patria dentro de 50 años, una potencia en este continente, grande, mucho más grande, mucho más libre y ustedes. Allá esta ese más ese mar es nuestro, mar venezolano, mar de las Antillas, mar, el Caribe, con todos los países hermanos que tenemos ahí.
Entonces uno siempre a pesar de los años transcurridos los ve a ustedes años tras año tras año y uno siente, siempre se siente como un cadete y ya yo trasciendo el ejercito, yo me siento como un cadete de la marina, del ejercito, de la guardia, de la aviación, por eso quería saludarlos de mi corazón y pedirles que dediquen todo su esfuerzo muchachada del siglo XXI, este siglo que comienza es de ustedes, esta Patria es de ustedes, ese pueblo es de ustedes, han retomado la senda de Bolívar, de Miranda, primer almirante de este país se llamó Francisco de Miranda, general en jefe y libertador Bolívar ese es el rumbo, no lo perdamos más nunca, independencia o nada, independencia y todo, patria libre y vida, esa es la consigna.

No podemos ser colonia de más nadie, de nadie, somos libres y ustedes están ahí con esos fúsiles comenzando a portar las armas sagradas de la República para junto al pueblo garantizar la libertad de Venezuela para siempre y la grandeza, porque sólo un país libre puede llegar a ser grande y este país nuestro nación como todos los países nacieron para ser libre y para ser grandes.
¡Firmes¡ colocar la bayoneta, cuando mande a discreción queda a la orden del señor teniente González Salina y me saluda a todos, al almirante director de la Escuela Naval de la Academia Naval de la Fuerza Armada y a todos los oficiales, guardia marina, clases y cadetes y personal civil que allí labora y tropas, marineros, es una gran escuela la Escuela Naval, quiero que sepan que ustedes están en una gran escuela, Escuela Naval de Venezuela, escuela de libertadores, escuela de patriotas, de revolucionarios, soldados revolucionarios y soldadas revolucionarias.
A discre... ción. Mande mi teniente de nuevo a la calle.

Presidente Chávez
Son las 10 y 15 minutos de la noche de este día sábado 23 de julio y me dirijo al país en unión de mi equipo de gobierno, el vicepresidente Elías Jaua, ministras, ministros del alto mando militar, los cadetes de nuestra gloriosa Academia Naval de Venezuela y desde mi corazón para manifestar mi inmensa alegría, felicidad de estar de nuevo en Venezuela después de una semana. Salimos de aquí un sábado, el sábado pasado exactamente cuando estaba cayendo el sol rumbo a Cuba, como bien se sabe, muy breve voy a ser.

Es un día de júbilo para mi, de alegría, no tengo la menor duda para la gran mayoría de nuestro pueblo, a lo largo de este semana no he perdido un instante mi atención sobre Venezuela, lo que acontece, las buenas nuevas, los problemas, las soluciones. Estaba comentando con los Ministros que estuve viendo al Vicepresidente entregando recursos del Consejo Federal de Gobierno al Poder Popular en Maracaibo, en Barquisimeto, hoy en Guarenas. Estuve viendo al ministro Loyo allá con los cafetaleros de Lara entregando créditos y además le dije a Fidel que estaba ahí, mira date cuenta pura gente joven, buenas señales, muy buenas señales, los jóvenes campesinos como yo tuvimos que irnos del campo, la gran mayoría durante los últimos años del siglo XX, ahora se están quedando en el campo, porque tienen tierras, porque tienen apoyo de la revolución, porque tienen el crédito, la maquinaria, las semillas, el apoyo social, el apoyo político, el apoyo pleno.

El Poder Popular desde Guarenas hasta Maracaibo, en oriente estaba también Isis, la vi allá con su discurso cada día más sólido. Estoy orgullo de mi equipo, de mi vicepresidente Elías a quien felicito de nuevo, pido un aplauso de todo el país para Elías Jaua Milano y todas las ministras y los ministros, Elías muchas gracias.
Asistentes [Aplausos].

Presidente Chávez
Muchas gracias, muchas gracias. Mi reconocimiento personal y mi apoyo moral y político, estuve ayer trabajando varias horas y antier con el vicepresidente Ramírez, Rafael Ramírez venía con nosotros en el avión, el vicepresidente Ricardo Menéndez, el ministro Ramírez, el Vicepresidente de Pdvsa, perdón, Asdrúbal, Eulogio, hablando de esa noticia tan importante que los medios privados no difunden por supuesto. La OPEP ha reconocido de manera oficial que Venezuela tiene la más grande reserva de petróleo de este planeta.
Asistentes [Aplausos].

Presidente Chávez
Esa es una noticia histórica, ah sólo que para despecho de esta señora oligarquía venezolana y el imperio yanqui, hasta hace apenas 8 años, 7 años, esa gigantesca reserva de petróleo no era venezolana aunque está en Venezuela en las profundidades de la faja del Orinoco, sino que era propiedad ya de las transnacionales imperialistas, por eso sólo la independencia, le decíamos a los cadetes y así le digo al pueblo, sólo la independencia, sólo la libertad, sólo ser libre nos permitirá desarrollarnos a lo grande y convertir a Venezuela en lo que tiene que ser, una gran republica, un gran país, una gran economía, una potencia en esta parte del mundo y de un mundo distinto, no el mundo de las bombas y las agresiones y los imperios, el mundo libre y pluripolar.

Les traigo un saludo de mucha gente de Cuba y especialmente del comandante en jefe Fidel Castro con quien estuvimos hasta salir del avión, Raúl el presidente cubano, Daniel Ortega el presidente de Nicaragua llegó a La habana tuvimos un almuerzo y una conversación de varias horas. Ayer estuvo Maradona con nosotros, también mandó un abrazo, Maradona dice que el gol contra Paraguay él lo hubiera validado, yo le pregunte por la mano de Dios ¿te acuerdas? Me explicó que él metió la mano de Dios y el gol contra Inglaterra, pero el gol, me dijo: no ese gol era validable, dependía de la decisión, del criterio pues pero una cosa tan rápida ahí.

Nuestra Vinotinto hoy batalló no pudo contra Perú, pero para mi son los campeones sentimentales de la Copa América, los declaro campeones sentimentales nuestra Vinotinto.
Asistentes [Aplausos].

Presidente Chávez
César Faria, vini vide vinci, antier hablé con él y le dije: ya eres campeón chico para mi son los campeones y así lo repito y mañana llega la Vinotinto, son nuestros campeones, una jornada heroica, histórica, bien, que es parte del resurgir, del renacer de Venezuela, algunos pretenden negarlo, no se puede tapar el sol con un dedo, no se puede tapar el mar con nada.

Bien, luego de esta semana de intenso trabajo en Cuba con un equipo médico de alta calidad, venezolanos y cubanos, debo decirles que vengo como lo decíamos allá cuando nos despedíamos frente a lo que llaman la Puerta Dorada el sábado en la tarde, dije, poniendo una gran fe en mis palabras pero además con conocimientos que tengo científicos médicos, estoy bien informado pues de lo que tengo y del proceso que vamos llevando, dije: vendré mejor de lo que me voy, cumplo la palabra, he venido mejor de lo que me fui.
Asistentes [Aplausos].

Presidente Chávez
Gracias a Dios, gracias a Jesús de Nazaret, gracias al manto de la Virgen (dice mi madre), gracias también digo yo a los espíritus de la sabana y gracias a ustedes, al pueblo, gracias al amor, gracias al apoyo moral y bueno y un esfuercito que yo adicional que he tenido que hacer de disciplina, de cadete, por eso me siento como un cadete; cinco de la mañana, no vieron que estoy mandando twitter a las 4 y media, porque a esa hora estoy levantado pues y ahorita voy miren, tratamiento, la cosa, esto, lo otro, las curas de las heridas de guerra como me dijo un médico cubano, usted tiene heridas de guerra ahí tenga en cuenta, porque había la batalla de Carabobo era el 24 de junio, tiene dos heridas de guerra cuídelas, ámelas, me dijo, respételas y las amo, las respeto.

En fin, el retorno de Zaratustra, el retorno, el pleno retorno, claro Fidel me decía hoy: Chávez es importante que el pueblo venezolano no crea que ya pasó todo, es importante que tu mismo no te vayas a pensar que ya pasó todo, no, estamos en pleno proceso de una lucha que es dura y que lleva su tiempo, la vamos ganando y la ganaremos pero lleva su tiempo y sus ritmos y yo estoy seguro que con algunas excepciones que no quiero ni comentar ya, cuento con la comprensión, el apoyo del pueblo venezolano, de la Nación venezolana, de la Patria venezolana.

Luego les decía que después de llegar a La habana el día sábado por la noche, fui sometido el domingo a intensos estudios de los que llama doctora Sadel, imagenología, por arriba, por debajo, tomógrafo de 126 que no tenemos aquí tomógrafos de esos todavía, 126 cortes un gigantesco tomógrafo.

Esta lloviznando vamos a terminar en un minuto, agua de Dios, luego, un minuto, luego bueno me hicieron imagenología y debo decirles que no se detectó presencia de células malignas en ninguna parte de mi cuerpo.

Asistentes [Aplausos].

Presidente Chávez
En un examen riguroso de casi todo el día, que si para allá, que si para acá, de todos modos el riesgo existe y por eso la quimioterapia que se aplicó toda esta semana en varias sesiones, duro, pero este cuerpo mío de cadete y de soldado aguantó algunas pequeñas molestias, es un tratamiento duro, concluyó el día de ayer, hoy un poquito de descanso y aquí estamos a continuar al batalla, el retorno pleno, el retorno perpetúo, pero ya ustedes saben debo ser disciplinado, esta lloviznando debemos irnos, estoy feliz ¡viva Venezuela!

¡Viva la vida!

Yo nací en esta rivera del Arauca vibrador, soy hermano de la espuma, de las garzas, de las rosas y del sol, mi amor a Venezuela.

¡Viviremos y venceremos! ¡Hasta la victoria siempre!

FIDEL: Una declaración brillante y valiente

domingo, 3 de julio de 2011

Reflexiones del compañero FIDEL: Una declaración brillante y valiente


La atención a otros asuntos ahora prioritarios, me apartaron momentáneamente de la frecuencia con que elaboré reflexiones durante el año 2010, sin embargo, la proclama del líder revolucionario Hugo Chávez Frías el pasado jueves 30 me obliga a escribir estas líneas.

El presidente de Venezuela es uno de los hombres  que más ha hecho por la salud y educación de su pueblo; como son temas en los que mayor experiencia ha acumulado la Revolución cubana, gustosamente colaboramos al máximo en ambos campos con este hermano país.

No se trata en absoluto de que ese país careciera de médicos, por el contrario, los poseía en abundancia e incluso entre ellos profesionales de calidad, como en otros países de América Latina. Se trata de una cuestión social. Los mejores médicos y los más sofisticados equipos podrían estar, como en todos los países capitalistas, al servicio de la medicina privada. A veces ni siquiera eso, porque en el capitalismo subdesarrollado, como el que existía en Venezuela, la clase rica contaba con medios suficientes para acudir a los mejores hospitales de Estados Unidos o Europa, algo que era y es habitual sin que nadie pueda negarlo.

Peor aún, Estados Unidos y Europa se han caracterizado por seducir a los mejores especialistas de cualquier país explotado del Tercer Mundo para que abandonen su patria y emigren a las sociedades de consumo. Formar médicos para ese mundo en los países desarrollados implica fabulosas sumas que millones de familias pobres de América Latina y el Caribe, no podrían pagar nunca. En Cuba sucedía eso hasta que la Revolución aceptó el reto, no solo de formar médicos capaces de servir a nuestro país, sino a otros pueblos de América Latina, el Caribe o del mundo.

Jamás hemos arrebatado las inteligencias a otros pueblos. En cambio en Cuba se han formado gratuitamente  decenas de miles de médicos y otros profesionales de alto nivel para devolverlos a sus propios países.

Gracias a sus profundas revoluciones bolivarianas y martianas, Venezuela y Cuba son países donde la salud y la educación se han desarrollado extraordinariamente. Todos los ciudadanos tienen derecho real a recibir gratuitamente educación general y formación profesional, algo que Estados Unidos no ha podido ni podrá garantizar a todos sus habitantes. Lo real es que el gobierno de ese país invierte cada año un millón de millones de dólares en su aparato militar y sus aventuras bélicas. Es además el mayor exportador de armas e instrumentos de muerte y el mayor mercado de drogas del mundo. Debido a ese tráfico, decenas de miles de latinoamericanos pierden la vida cada año.
Es algo tan real y tan conocido, que hace más de 50 años, un Presidente de origen militar denunció, con tono amargo, el poder decisivo acumulado por el complejo militar industrial en ese país.

Estas palabras estarían de más si no mediara la odiosa y repugnante campaña desatada por los medios de difusión masiva de la oligarquía venezolana, al servicio de ese imperio, utilizando las dificultades de salud que atraviesa el Presidente bolivariano. A este nos une una estrecha e indestructible amistad, surgida desde que visitó por primera vez nuestra patria, el 13 de diciembre de 1994.

A algunos les extrañó la coincidencia de su visita a Cuba con la necesidad de atención médica que se produjo. El Presidente venezolano visitó a nuestro país con el mismo objetivo que lo llevó a Brasil y Ecuador. No traía intención alguna de recibir servicios médicos en nuestra patria.

Como se conoce un grupo de especialistas cubanos de la salud prestan, desde hace años, sus servicios al Presidente venezolano, que fiel a sus principios bolivarianos, jamás vio en ellos extranjeros indeseables, sino hijos de la gran Patria Latinoamericana por la cual luchó el Libertador hasta el último aliento de su vida.

El primer contingente de médicos cubanos partió hacia Venezuela cuando se produjo la tragedia en el estado de Vargas, que costó miles de vidas a ese noble pueblo. Esta acción de solidaridad no era nueva, constituía una tradición arraigada en nuestra patria desde los primeros años de la Revolución; desde que hace casi medio siglo médicos cubanos fueron enviados a la recién independizada  Argelia. Esa tradición se profundizó a medida que la Revolución cubana, en medio de un cruel bloqueo, formaba médicos internacionalistas. Países como Perú, la Nicaragua de Somoza y otros del hemisferio y el Tercer Mundo, sufrieron tragedias por terremotos u otras causas que requirieron la solidaridad de Cuba.  Así nuestra patria se convirtió en la nación del mundo con más alto  índice  de médicos y personal especializado en salud, con elevados niveles de experiencia y capacidad profesional.

El Presidente Chávez se esmeró en la atención de nuestro personal de salud. Así nació y se desarrolló el vínculo de confianza y amistad entre él y los médicos cubanos que fueron siempre muy sensibles al trato del líder venezolano, el cual por su parte, fue capaz de crear miles de centros de salud y dotarlos de los equipos necesarios para prestar servicios gratuitos a todos los venezolanos. Ningún gobierno del mundo hizo tanto, en tan breve tiempo, por la salud de su pueblo.

Un elevado porcentaje de personal cubano de la salud prestó servicios en Venezuela y muchos de ellos actuaron además como docentes en determinadas materias impartidas para la formación de más de 20 mil jóvenes venezolanos que comienzan a graduarse como médicos. Muchos de ellos comenzaron sus estudios en nuestro propio país. Los médicos internacionalistas integrantes del Batallón 51, graduados en la Escuela Latinoamericana de Ciencias Médicas, han ganado un sólido prestigio en el cumplimiento de complejas y difíciles misiones. Sobre esas bases se desarrollaron mis relaciones en ese campo con el presidente Hugo Chávez.

Debo añadir que a lo largo de más de doce años desde el 2 de febrero del año 1999, el Presidente y líder de la Revolución venezolana  no ha descansado un solo día, y en eso ocupa un lugar único en la historia de este hemisferio. Todas  sus energías, las ha consagrado a la Revolución.

Podría afirmarse que por cada hora extra que Chávez dedica a su trabajo, un Presidente de Estados Unidos, descansa dos.

Era difícil, casi imposible, que su salud no sufriera algún quebranto y eso sucedió en los últimos meses.

Persona  habituada a los rigores de la vida militar, soportaba estoicamente los dolores y molestias que con frecuencia creciente lo afectaban. Dadas las relaciones de amistad desarrolladas y los intercambios constantes entre Cuba y Venezuela, sumada a mi experiencia personal con relación a la salud, que viví desde la proclama del 30 de julio del año 2006, no es raro que me percatara de la necesidad de un chequeo riguroso de la salud del Presidente. Es demasiado generoso de su parte,  atribuirme algún mérito especial en este asunto.

Admito, desde luego, que no fue fácil la tarea que me impuse. No era para mí difícil percatarme de que su salud no andaba bien. Habían transcurrido 7 meses desde que se realizó su última visita a Cuba. El equipo médico dedicado a la atención de su salud me había rogado que hiciera esa gestión. Desde el primer momento la actitud del Presidente era informar al pueblo, con absoluta claridad, su estado de salud. Por ello, estando a punto ya de regresar, a través de su Ministro de Relaciones Exteriores, informó al pueblo sobre su salud hasta ese instante y prometió mantenerlo detalladamente informado.

Cada cura iba acompañada por rigurosos análisis celulares y de laboratorio, que en tales circunstancias se realizan.

Uno de los exámenes, varios días posteriores a la primera intervención, arrojó  resultados que determinaron una medida quirúrgica más radical y el tratamiento especial del paciente.
En su digno mensaje del 30 de junio, el Presidente notablemente recuperado habla de su estado de salud con toda claridad.

Admito que para mí no fue fácil la tarea de informar al amigo de la nueva situación. Pude apreciar la dignidad con que recibió la noticia que -para él con tantas tareas importantes que llevaba en la mente, entre ellas el acto conmemorativo del Bicentenario y la formalización del acuerdo sobre la unidad de América Latina y el Caribe- mucho más que los sufrimientos físicos que implicaba una cirugía radical, significa una prueba que como expresó la hizo comparar con los momentos duros que le tocó enfrentar en su vida de combatiente indoblegable.

Junto a él,  el equipo de personas que lo atienden y que él calificó de sublimes, han librado la magnífica batalla de la que he sido testigo.

Sin vacilación afirmo que los resultados son impresionantes y que el paciente ha librado una batalla decisiva que lo conducirá y con él a Venezuela, a una gran victoria.

Hay que hacer que su alegato se comunique al pie de la letra en todas las lenguas, pero sobre todo que sea traducido y subtitulado al inglés, un idioma que pueda entenderse, en esta Torre de Babel que el imperialismo ha convertido el mundo.

Ahora los enemigos externos e internos de Hugo Chávez están a merced de sus palabras y sus iniciativas. Habrá sin dudas sorpresas para ellos. Brindémosle el más firme apoyo y confianza. Las mentiras del imperio y la traición de los vendepatrias serán derrotadas. Hoy hay millones de venezolanos combativos y conscientes, que la oligarquía y el imperio no podrán volver a someter jamás.

Fidel Castro Ruz
Julio 3 de 2011
4 y 12  p.m.

 

Una declaración brillante y valiente (+ Fotos)

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